Un estudio de la Universidad Harokopiode Atenas (Grecia) ha determinado que una dieta cercana a la mediterránea, basada en un alto consumo de pescado y aceite de oliva y una ingesta menor de carnes rojas, influye de manera positiva en la salud ósea de las mujeres. Los resultados de la investigación sugieren, por tanto, que este patrón alimenticio tiene propiedades para conservar las propiedades de los huesos durante la edad adulta.

La dieta es una de las variables que influyen en el desarrollo y mantenimiento de la masa ósea. Para la salud de los huesos, los nutrientes más relevantes son el calcio y el fósforo, que componen del 80 al 90% de su contenido mineral; las proteínas y otros minerales y vitaminas también son esenciales para la conservación del esqueleto.

aceiteoliva

Los análisis tradicionales se han centrado en estudiar la relación que existe entre un nutriente específico (por ejemplo, el calcio) y la salud de los huesos. Pero, un grupo de investigadores de la Universidad Harokopiode Atenas, Grecia, ha desarrollado un estudio en doscientas veinte mujeres adultas griegas, cuyo valor reside en que analiza el efecto de una dieta completa, compuesta por muchos alimentos, en la masa ósea.

Los científicos comprobaron si la Dieta Mediterránea, rica en verduras, aceite de oliva, baja en carnes y productos lácteos, y con un consumo moderado de alcohol, u otros patrones de alimentación, guardaban relación con la conservación de los huesos de mujeres adultas de Grecia. Determinaron, finalmente, que una dieta cercana a la mediterránea, basada en un alto consumo de pescado y aceite de oliva y una ingesta menor de carnes rojas, influye de manera positiva en el índice de masa ósea de dichas mujeres.

Los resultados de la investigación sugieren, por tanto, que este patrón alimenticio tiene propiedades para conservar los huesos durante la edad adulta.

El artículo fue publicado en la revista Nutrition, escrito por Meropi D. Kontogianni, Labros Melistas, Mary Yannakoulia, Ioannis Malagaris, Demosthenes B. Panagiotakos, y Nikos Yiannakouris dela Universidad Harokopio de Atenas, Grecia.